ayer descubrimos esto.
nadie nos había hablado de ello.
por casualidad, markus se encontró con un vecino que le dijo que "venía de arriba", "que sí, sí se puede subir" y "bueno, está bien, hay barbacoa".
y subimos.
y vimos el financial district entero y el bay bridge y coit tower y todos los tejados de north beach y los hoteles de al capone y el océano; escuchamos los barcos entrando al puerto, subimos con una botella de vino por la noche y estuvimos mirando las estrellas y parándonos a pensar en lo afortunados que somos.
de verdad que aún no me creo que nadie me dijera nada sobre la azotea.
me parece que se ha ganado el derecho de estar entre mi colección de tesoros.
mi prima vive en Nueva York, en una isla que no recuerdo cómo se llama, pero es como una especie de isla-para-investigadores, donde hay residencias para investigadores... en fin, no recuerdo :) lo importante es que una vez que fuimos a verla, nos subió a la azotea de su casa. Era de noche. Lloré. Se veía todo NY iluminado. Se me cortó la respiración. Giraba sobre mí misma y sólo veía más y más NY iluminado. Ha sido una de las sensaciones que más me han embargado.
ResponderEliminarQué bien que tú sientas eso todos los días. Felicidades :)
un beso!