07 febrero 2011

let's call it a day

hoy a sido un día de 33 horas, 33 para moi. estoy absolutamente acabada.



leah ha decidido que le gusta más el horario de la costa oeste y anoche le pareció un buen momento para mantener las costumbres de siempre. así que, en lugar de saltarnos el jetlag como habíamos hecho hasta el momento, acabamos danzando toda la noche las dos. por si tenéis curiosidad, así es como pasamos las noches de insomnio en casa de los oviedo:

9:00 - leah se va a acostar.
23:30 - silvia se va a acostar.
23:32 - leah se despierta.
23:33 - silvia se despierta
00:00 - silvia y abuelos intentan convencer a leah de que se duerma.
01:30 - leah ve la superbowl con el abuelo.
03:30 - leah juega y silvia trabaja (al menos, en lugar de lamentarme por mi falta de sueño conseguí hacer algo productivo)
04:00 - leah se come un churro. silvia se toma un café.



05:00 - rufo pide comida (al pobre le operaron el jueves y ha sido todo un paso). silvia se toma un café.
06:00 - leah ve los dibujos (si jugara al yo nunca he de las madres, cuando saliera el tema de la televisión me tocaría beberme la botella entera).
07:00 - los abuelos se levantan. leah se come un churro. silvia se toma otro café.
08:30 - leah decide dormirse. los abuelos se han ido a trabajar. silvia, después de tres cafés, decide que lo mejor es acabarse la cafetera y comerse un pastel.
09:00 - silvia escribe dos poemas. después de meses de improductividad artística estoy on fire desde que tengo los horarios cambiados.
09:30 - llega el regalo del abuelo.
10:00 - leer, leer, leer. intentar dormir.
12:00 - suena el teléfono.
12:30 - despertar a leah. tarea imposible. intentarla dar de comer. más imposible todavía. sacar al perro.
14:30 - ir a ver a la abuela (súper abuela).
16:30 - volver a casa (leah duerme).
17:00 - silvia intenta dormir. la vecina ha decidido sacar a sus cuatro hijos llorando a grito pelado al descansillo. silvia espera veinte minutos. sale y le pide por favor que le ponga el chupete a los niños "o algo". coge al niño pequeño. para de llorar. es cerrar la puerta, soltarle en el carro y la llantina continúa cinco minutos más. momento perfecto para otro café y un sandwich de salmón (antojos).
18:30 - ya están ana y los abuelos. paseo, chupachups y revista de pocoyó.
21:00 - baño.
22:00 - cena. al menos leah ha decidido comer.
23 (¿o 32?):00 - momento de hiperactividad pre-cuna. leah llama al 112.
23:45 - mi madre me dice que leah acaba de dormirse (¡hurra!)

creo que por hoy tengo derecho a acabarme mi libro y a una cama calentita. 6 horas, no pido más.
y, ahora que lo tengo apuntado, la próxima vez que me queje de que estoy cansada volveré a este post para tener perspectiva. pensaba que el día del vuelo iba a ser largo... pero el día del jetlag  lo supera con creces.

eso sí, leah ha estado graciosísima. me he dedicado a enseñarle tonterías esta noche. algún día os hace el show.

para los curiosos y los estudiantes de inglés... call it a day viene ser algo así como cerrar el chiringuito.
pues eso. ¡hasta mañana! 

por cierto, no os perdáis mis posts de esta semana en Yahoo!; hay curiosidades para todos los gustos.

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